AMLO: doble moral y calumnia en la política de EU hacia AL
El presidente Andrés Manuel López Obrador responsabilizó al Departamento de Estado de Estados Unidos de estar detrás de las versiones periodísticas que señalan que en su primera campaña presidencial (2006) habría recibido un millonario financiamiento ilícito por parte de capos del narcotráfico.
Rechazó esas acusaciones, exigió pruebas y advirtió que este intento por atacarlo está relacionado con la coyuntura electoral: en junio en México y en noviembre en Estados Unidos. Es completamente falso, es una calumnia. Están, desde luego, muy molestos, y lamentablemente la prensa, como hemos visto, no sólo en México, en el mundo, está muy subordinada al poder. En el caso de Estados Unidos, tiene mucha influencia el Departamento de Estado y las agencias en el manejo de los medios y aquí también, pero no hay ninguna prueba. Son unos viles calumniadores, aunque los premien como buenos periodistas.
Al preguntarle en la mañanera sobre el tema, subrayó que esta estrategia responde a la política exterior estadunidenses hacia las naciones de América Latina. Es un doble discurso, una doble moral, esa es la política que deben cambiar. Y demandó: si hay algo que no les gusta, pues que lo planteen abiertamente.
Aseguró: tiene que decir la DEA (Administración de Control de Drogas) si es cierto, no es cierto, cuál es la investigación que hicieron, cuáles son sus pruebas; pero no (sólo) la DEA, el Departamento de Estado.
–¿A qué se debe que el ataque venga del extranjero? –se le preguntó.
–Pues porque hay elecciones. Siempre que hay elecciones, aquí y allá y en cualquier parte. Sí, es una campaña, es Estados Unidos, es en Alemania, es aquí. ¿Dónde están las pruebas? Siempre es así: un prestigiado periodista internacional, como si fueran puros –respondió.
El jefe del Ejecutivo aseveró que se trata de un montaje y propaganda sucia que se dan por el contexto electoral para lanzarse en su contra, ante lo que acotó: si yo no soy candidato. Sin embargo, sostuvo, estos ataques no funcionarán a sus adversarios.
“¿Para qué? Nada es casual. ¿Por qué ahora? Están diciendo que es la DEA. Nada más decirles: pues no a la DEA, (sino) al Departamento de Estado, al gobierno de Estados Unidos, que esto tiene que ver con el hampa del periodismo y de la política. Y que si hay algo que no les gusta, pues que lo planteen abiertamente, que no lo manden a decir (…) el periodista puede decir: ‘yo no estoy afirmándolo’, incluso la misma DEA dijo que no había elementos. Sí, pero la calumnia, cuando no mancha, tizna. Y en eso son especialistas. Calumnia, porque algo queda y hay elecciones.”
Indicó que hace una semana una universidad de ultraderecha de Estados Unidos publicó un reportaje en el que se aseguraba que el movimiento del Presidente va a continuar en el poder “por el apoyo del narco, ahora traen eso. ¡A ver, pruebas! ¿Dónde están las pruebas? Viles calumniadores”.
Incluso recordó que durante el juicio en aquel país contra García Luna, cuando se preguntó al testigo y ex narcotraficante Jesús El Rey Zambada si se había entregado dinero del cártel de Sinaloa a la campaña de López Obrador, éste lo negó.
El Presidente no dejó pasar la oportunidad para dejar clara su postura: No voy a llevar a cabo ningún juicio formal, pero denuncio, no al periodista o a los periodistas, no a los medios, denuncio al gobierno de Estados Unidos de permitir estas prácticas inmorales y contrarias a la ética política que debe de prevalecer en todos los gobiernos del mundo. ¿Está claro o no está claro?
La Jornada