Paquete de reformas, para echar atrás la herencia «antipopular» del neoliberalismo: AMLO
Con 20 iniciativas de reforma constitucional, el presidente Andrés Manuel López Obrador conmemoró el 107 aniversario de la Constitución, con el objetivo de que si “los reaccionarios logran regresar al poder, que sea mucho lo que tenga que echar atrás y que la regresión les resulte muy difícil, ardua, hasta el punto que les sea imposible” echar atrás la llamada Cuarta Transformación.
Sus propuestas abarcan una reforma del Poder Judicial, la reorganización del sistema político, medidas económicas como que los mexicanos “serán dueños de sus viviendas”, y el reforzamiento de sus programas sociales.
En lo que pareció uno más de sus informes de gobierno, López Obrador anunció un paquete de reformas que van desde el aumento al salario del salario mínimo por encima de la inflación hasta revertir las reformas de los gobiernos de Ernesto Zedillo y Felipe Calderón para garantizar la jubilación al cien por ciento. Y propuso la creación de un fideicomiso de 64 mil millones de pesos.
Como reformas políticas, propuso reducir el número de diputados federales a 300 y de senadores a 64, así como reducir el gasto de los partidos políticos y a las campañas electorales.
Además, eliminar las diputaciones y senadurías plurinominales, y elegir por voto a los consejeros y magistrados electorales.
Respecto al Poder Judicial, López Obrador ratificó su propósito de que los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sean elegidos por voto popular y que los candidatos sean propuestos por el presidente, el Congreso y el Poder Judicial, tal y como publicó Proceso el sábado pasado.
Insistió en un su propósito de que la Guardia Nacional quede bajo la jurisdicción de la Secretaría de la Defensa Nacional, a pesar de que una iniciativa anterior en el mismo sentido ya fue rechazada por el máximo tribunal del país.
López Obrador aseguró que con sus propuestas busca desterrar las reformas del periodo neoliberal porque “son contrarias al interés público” y las “adulteraciones que niegan el sentido general de la Carta Magna” que fue fruto de un movimiento popular, revolucionario y concebida desde el inicio con un espíritu nacional, social y, subrayo, público.
López Obrador hizo sus propuestas en el antiguo recinto del Congreso, en el Palacio Nacional, acompañado solo de su gabinete legal y ampliado, y sin ingreso de la prensa.
Proceso