Con una serie de condiciones, la Comisión Federal de Competencia (Cofece) destrabó la última etapa para que el Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin) adquiera 13 plantas de energía eléctrica a la española Iberdrola y dio seis meses para concluir la operación, lo que incrementará en alrededor de 3 mil 60 millones de dólares la deuda pública presupuestal este año, informó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
El pleno de la Cofece condicionó la compra a que las plantas operen de manera independiente en el mercado y se evite el intercambio de información sensible o estratégica entre competidores. El cumplimiento de estas condiciones (que tendrán vigencia de 10 años y serán constantemente verificadas) garantizará que la competencia económica del mercado de la generación eléctrica no se vea afectada, enfatizó el regulador.
Al margen del revés que la Suprema Corte de Justicia de la Nación asestó a la reforma eléctrica de 2021, que pone al centro un avance en la cuota de mercado para la Comisión Federal de Electricidad (CFE), el Estado recupera el liderazgo en la generación de energía eléctrica, meta que se fijó en la iniciativa de reforma constitucional, sin afectaciones a la competencia y en beneficio de los consumidores, agregó la SHCP.
Pese a que en abril del año pasado, la dependencia resaltó que la operación no se traduciría en endeudamiento público, ahora destacó que la compra a Iberdrola no implica aumentar la deuda pública presupuestal más allá del costo de adquisición de 51 por ciento de la misma y, en esa medida, no presiona las finanzas públicas. El negocio se pactó en alrededor de 6 mil millones de dólares, por lo que el débito que se integrará al balance público de este año equivale a 3 mil 60 millones de dólares o poco más de 52 mil millones de pesos.
La adquisición se realiza por medio de un vehículo de inversión nacional con participación mayoritaria del Fonadin, administrado por Mexico Infrastructure Partners, y el apoyo de las bancas de desarrollo y la comercial, al financiar 60 por ciento de la compra. Se buscará asimismo la participación en la inversión de las Afores, fondos de pensiones y otros inversionistas institucionales en beneficio de los trabajadores de México, acotó Hacienda.
Se adquieren 12 plantas de ciclo combinado ubicadas en Baja California Norte, Durango, Nuevo León, San Luis Potosí, Sinaloa y Tamaulipas y una de energía eólica en Oaxaca. Todas serán operadas por la CFE, sin que ésta se comprometa financieramente.
Más de 80 por ciento de la capacidad de producción involucra 10 plantas de generación que cuentan con contratos de compraventa de energía eléctrica bajo la modalidad de productor independiente de energía (PIE). Esta energía, a su vez, está contratada a largo plazo por CFE Generación V (que administra la energía producida por los PIE) con CFE Suministro Básico.
Para garantizar que las plantas operen de manera independiente en el mercado, Fonadin deberá reducir y mantener su inversión en un máximo de 51 por ciento, lo cual debe concretarse en 24 meses. Se debe designar a un administrador profesional independiente, encargado de tomar decisiones relativas a la operación de las plantas de generación eléctrica en el mercado, condicionó la Cofece al autorizar la adquisición el 14 de febrero.
La Jornada
